martes, 30 de abril de 2013

Rafael Nuñez Ramírez, Puebla Unida y San Martín hecho un desastre

A Rafael Nuñez Ramírez lo venden como una persona honesta, empero, dicha honestidad resulta raspada con su candidatura de coalición. El PT lo propuso desde hace tres años, Rafa solo abandonó al PAN para echarse en brazos del PT únicamente por conveniencia personal, no porque en realidad abandere las aspiraciones de los texmeluquenses y los documentos básicos de ese partido político. Esto tiene nombre, se le llama cinismo y pragmatismo político. Contenderá “representando” a 5 partidos políticos (PT, PAN, PANAL, PRD y Compromiso por Puebla), los primeros 4 con presencia nacional y el último, con presencia local. En política no siempre los resultados de los números cuadran, por ejemplo: uno más uno más uno más uno más uno, no siempre dan como resultado 5. 4 años con ocho meses son un platillo suculento para cualquier aspirante a gobernar un municipio y, sobre todo si no se trata de san Juan de los Nopales, en donde hay muy poco que administrar. Es necesario mencionar que Rafa se prestó a las negociaciones tras bambalinas y en las alturas estatales para suplir a quienes con toda justicia aspiraban a representar a sus organismos políticos en San Martín Texmelucan. Como representante de la Coalición Puebla Unida en San Martín Texmelucan, su fuerza actual es más que engañosa debido a que su postulación fue el resultado de una negociación de espaldas a la militancia de quienes dice representar. El ejemplo más claro son las rarísimas, porque casi no ocurren, movilizaciones que llevaron a cabo los “precandidatos” del PAN en contra de la imposición. El ejemplo más grotesco en contra de una imposición fue el actual director del F5 (Juan Escalante), quien fue impuesto como producto de los enjuagues de la maestra, hoy en desgracia y tras las rejas, con el gobernador Moreno Valle. Hace unos días escribí que la fuerza real de los militantes y la de los “precandidatos” del PAN texmeluquense la veríamos en unos días más: ya se ha visto, no tienen fuerza porque únicamente se supeditan a lo que dicen las cúpulas de la dedocracia que impera al interior de todos los partidos políticos sin excepción. Si los líderes emanaran a partir de las decisiones tomadas por la base y a su vez cada uno creara una sólida base de apoyo, la élite poblana estaría en problemas y difícilmente podría operar una imposición, otra cosa sería. Algo que tratan de ocultar quienes ya se frotan las manos y hacen cuentas alegres con la imposición de Rafa Nuñez a los miembros de los partidos que le sumaron en bloque es que cometieron una grave falta, una falta de respeto hacia la militancia de los otros partidos, en especial a la del PAN que fue la única que objetó. En la cima están contando: uno más uno más uno más uno más uno y, les da como resultado cinco. No obstante, hay otros factores que suelen intervenir para dar resultados inesperados: uno muy importante, es la forma en que actúan el PRI y sus mapaches, tramposos por formación y, el otro, es el comportamiento del electorado que dolido y engañado por manos ajenas, del nivel estatal, que tomaron decisiones sin considerarlos, podrían no empatar con los intereses de la cúpula y darles un voto de castigo, una sorpresita que alteraría el resultado de las cuentas. A Rafa Nuñez le están concediendo un liderazgo ciudadano que en la realidad no se ve, estuvo ausente en momentos claves, no se le vio, ni siquiera hizo acto de presencia, ni abanderó lucha alguna en contra de las violaciones constantes a la ley de Carlos Sánchez, pero tampoco operó en el mantenimiento e incremento de su capital político. Los candidatos de todos los partidos que contienden en nuestra localidad son producto de las imposiciones y del dedazo no de una fuerza propia ni de la capacidad de liderazgo. Más que fortalecer una alianza, le están allanando el camino al PRI. Esperen la siguiente entrega en donde explicaré por qué.

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